Examinando por Autor "Brizuela B., Luis"
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Ítem Compilación sobre la investigación en pudrición de mazorca (Stenocarpella maydis) en la secretaria de recursos naturales de Honduras.(Zamorano: Escuela Agrícola Panamericana, 2015, 1993) Brizuela B., LuisLa pudrición de mazorca continúa siendo un serio problema en la producción de maíz en Honduras, ya que las pérdidas en ciertos ciclos del cultivo oscilan entre 25 y 75%. La enfermedad está estrechamente relacionada con las condiciones climáticas, sobre todo la precipitación y el estado fisiológico del cultivo; sin embargo, existen otros factores, como el buen control de malezas y la adaptación de ciertos genotipos a las zonas maiceras de Honduras que pueden ayudar a controlar este problema. En 1,013 mazorcas provenientes de 97 localidades en nueve departamentos de Honduras, Stenocarpella maydis fue identificada como el patógeno que causa mayor daño. Sin embargo, en los departamentos de Comayagüa, Ocotepeque, Cortés, Intibucá y Yoro también se detectó Gibberella spp. A partir de 1987 se inició un proyecto de fitomejoramiento en busca de genotipos con resistencia a la pudrición de mazorcas, utilizando condiciones naturales de infección o inoculaciones artificiales, en poblaciones que presentaban cierta tolerancia, como Acacia (1), 84 RD, R.R.M. x C17 (población de Costa Rica), Pool 20,23 y 24, provenientes de CIMMYT, 1\isa morada x ICTA B-l y la variedad Guayape B-102.Ítem Evaluación de líneas s1 inoculadas para selección por resistencia a la pudrición de mazorca causada por stenocarpella spp. En Honduras durante 1988(Zamorano: Escuela Agrícola Panamericana, 2016., 1990) Brizuela B., Luis; Paz, José; Fernández, Héctor; Córdova, Hugo; Escuela Agrícola Panamericana, Zamorano.Costa Rica, Honduras y Guatemala tienen ambientes favorables para el desarrollo de hongos causantes de pudrición de mazorcas en el campo tales corno Stenocarpella spp. yFusarium spp., en donde se han registrado pérdidas superiores al 40% la alta precipitación (2000 mm/año) y la costumbre de dejar en el campo el material contaminado por estos hongos, favoreció la elevada incidencia de la enfermedad en 1988.